Oxitocina: pura PNI clínica. Del amor a la regeneración

Aquí tienes este interesante post de la oxitocina, la hormona que muchos conocen como la del parto o del amor, pero tiene otras muchas funciones. La Dra. Begoña Ruiz nos lo explica en este interesante post. ¡A APRENDER TOCA!

¿Qué es la oxitocina?

La oxitocina es una hormona producida por el hipotálamo y secretada por la glándula pituitaria, es decir, que la produce nuestro cerebro. Esta importante hormona juega un papel crucial en el proceso del parto y lactancia, pero es probable que te sorprenda saber que también ayuda con la reproducción masculina, y otras muchas funciones que te vamos a describir, como el contacto y afecto social, el amor, la hormona anti-estrés y del orgasmo.

Oxitocina, amor y relaciones sociales

En las mujeres, la oxitocina juega un papel primordial en el parto. Estimula la contracción de los músculos uterinos, dando comienzo al parto, y a continuación también aumenta la producción de prostaglandinas, que hacen avanzar el mismo y aumentan aún más las contracciones. Todo súper bien organizado y orquestrado para que mamá pueda dar a luz a su bebé. Debido a este efecto, la oxitocina sintética se usa tanto para inducir el parto como para ayudar a la expulsión, pero sus efectos no son exactamente los mismos que la natural, que tiene un ritmo y un ciclo, y puede producir una gran cantidad de efectos no deseados, tanto en la madre como en el bebé.

Y en la madre lactante

Una vez que nace el bebé, la oxitocina permite la lactancia al llevar la leche a la glándula mamaria. Cuando el bebé succiona el pezón de la madre (es decir, que la oxitocina se produce por estimulación de éste), la secreción de oxitocina hace que la leche se libere para que el bebé pueda alimentarse. Cosas curiosas, la estimulación del pezón del hombre también haría que al final acabase produciendo leche (DISCLAIMER: No probar en casa ?).

Más curioso es que, al mismo tiempo, la oxitocina se libera en el cerebro para estimular una mayor producción de oxitocina (vamos, que entramos en un doble loop como el de las motañas rusas) para que veas lo importante que es la lactancia en nuestra vida. Eso sí, una vez que el bebé deja de alimentarse, la producción de la hormona se detiene hasta la próxima alimentación.

Preparando el curso sobre dieta cetogénica que imparto desde Healthy Institute, me resultó súper interesante descubrir que la exposición de mamá durante el embarazo a dieta cetogénica, aumenta la sociabilidad y mejora la configuración cerebral de la descendencia, disminuyendo incidencia de autismo y problemas de comunicación social; todo ello mediado por la oxitocina, que aumenta a nivel cerebral.

Hay tantas cosas que han sido de una derterminada manera en toda nuestra vida evolutiva, que han creado caminos de comunicación en su momento tan obvios, pero que hoy en día hemos perdido y la ciencia está (re)descubriendo.

¿Y en el hombre?

En los hombres, la función de oxitocina es menos importante para la vida postnatal del bebé (como es lógico), pero juega un papel importante en el movimiento de los espermatozoides y también parece afectar la producción de testosterona en los testículos.

La oxitocina, hormona social

Además de un papel en el ´inicio de la vida´, la oxitocina también controla algunos comportamientos del ser humano y se encarga de la interacción social. Es la oxitocina la que produce el vínculo entre una madre y un bebé, y también desempeña un papel súper importante en el reconocimiento (padres-hij@s e hij@s-padres, pero también entre humanos de más edad), la excitación sexual, la confianza y la ansiedad. Algunas investigaciones muestran que la hormona podría ser de utilidad para superar adicciones y mejorar el estrés.

Además, es una hormona que regula el crecimiento del neocórtex, parte característica del ser humano y que es lógico que, como parte cerebral implicada en el comportamiento social, se regule gracias a la oxitocina (es decir, a partir del contacto y relaciones sociales), desde la lactancia hasta la edad adulta.

Y del enamoramiento, ¿no?

Sí, la oxitocina es la hormona del bonding, es decir, de la unión. Vamos, del enamoramiento, de no dejar de pensar en la persona que amamos, y que nos hace desearla, anhelar tocarla y estar con ella. ¿Te acuerdas de que cuanto más estimulabas la producción de leche materna, más oxitocina, y así hasta el infinito? Pues eso pasa con el enamoramiento. Sea a nivel de ´pareja´ o de paternidad (ya sabes, el ´amor de madre o de padre´ ), de ahí la frase ´el amor es ciego´. Por eso tu hij@ es el mejor del mundo, y el más guap@ (y que nadie diga lo contrario). Por eso si estamos enamorad@s no vemos los ´defectos´ de nuestra pareja. Y por esta hormona, por la oxitocina, cuando hacemos el amor o tenemos sexo con la persona amada, nos enamoramos más y queremos más.

Sí, el amor es ciego, pero la culpa es de la oxitocina

Lo más interesante, la hormona anti-inflamatoria

Siendo la hormona de la interacción social, y siendo el homo sapiens sapiens un ser social, resulta muy interesante ver que la oxitocina modula caminos parasimpáticos (relajación y anti-estrés) y que tiene además efectos anti-inflamatorios y anti-oxidantes, que justifican el necesario y comprobado efecto de la interacción social en la salud, tanto física como emocional.

Pues estaría bien una oxitocina en pastillas…

Pero… ¿en enfermedades también?

Pues sí, se ha comprobado los efectos positivos de la oxitocina (tanto el contacto físico, como el contacto social, como la propia administración de oxitocina) en:

En resumen…

Con los efectos anti-inflamatorios y regeneradores de la oxitocina, podemos decir que, tanto actualmente si estamos conviviendo con gente, como cuando avancen las fases de desescalada; por favor, con precaución y sentido común; que el contacto social, como parte del diseño humano, nos aporta un gran número de beneficios y es un importante anti-inflamatorio.

¡Abraza a tus seres queridos!

Si te ha gustado el post y quieres más información, pásate por nuestro blog de PNIc, donde hay un interesante post sobre el coronavirus, y otro sobre la motivación y la dopamina en estos días de confinamiento (¡ya queda menos!), o también puedes consultar los diferentes cursos de formación en PNI Clínica que ofrecemos.

 

#behealthy!

 

Referencias

¡En verde!

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies ACEPTAR

Aviso de cookies