Información y ciencia en tiempos de pandemia (sindemia)
Llevo días, o más bien, semanas, pensando en cómo escribir este post. Sobre todo por los acontecimientos de las últimas semanas relacionados con el certificado Covid en Catalunya, los nuevos confinamientos en Austria, la obligatoriedad de vacunación en Alemania y lo que se ve reflejado en los medios de comunicación (que de verdad, me cuesta no llamarlos, medios de infoxicación, ya que, como puedes ver en lo que significa el neologismo, nos dan demasiada información difícil de procesar, con un grandísimo sesgo. Luego te hablaré de Noam Chomsky y de las estrategias de manipulación de los medios).
Como todo post/artículo, sé que estoy expuesta a comentarios, y todos son bienvenidos. Pero por favor, igual que yo he documentado todas mis afirmaciones de modo científico, te pido criterio. Y redundantemente, criterio crítico y constructivo. Aún no se han publicado estudios en el que nadie haya muerto por escuchar una opinión contraria a la suya. Igual que tampoco hay un estudio a doble ciego randomizado sobre el uso del paracaídas (el mejor artículo de la historia, pincha AQUÍ). Pero siempre, por favor, desde el amor, el respeto y la buena argumentación. Y teniendo presente que el sentido común es, en muchas ocasiones, el menos común de los sentidos. Te pediría que si vas a comentar, pienses las consecuencias de tu comentario y desde dónde sale: miedo, ignorancia, incomodidad, resistencia a ver la realidad, o simplemente, convicción. Y entonces, comenta.
Voy a intentar (aunque en terapia decimos que si se intenta, no se consigue) seguir un orden lógico, y a ver si puedo transmitir lo que quiero contarte.
Empecemos por los medios de comunicación…
En la búsqueda del rigor y la seriedad de este artículo, y a colación del párrafo anterior, me gustaría citar las ´10 Estrategias de manipulación Mediática´, del famoso lingüista Noam Chomsky, con texto del francés Sylvain Timsit, que elaboró un documento que fue publicado por primera vez en francés, en el año 2002, con el título ‘Stratégies de manipulation’, en la web syti.net. Te dejo una foto donde se resume muy bien:
Si le echas un vistazo al documento, creo que todas se han utilizado descaradamente en el último año y medio. Pero ya no hablo sólo del virus; seguro que te sientes identificad@ en muchas de ellas, o las has identificado muchas veces escuchando las noticias. Desvío la atención de aquí, la llevo allí; te ofrezco una solución a esto, un sufrimiento necesario, un sacrificio personal, no queda otro remedio, las cosas son así, utilizo tus emociones y los seres que has perdido o tienes en el hospital, tú eres el responsable… etc. El conocimiento es poder, pero la información no siempre te lo aporta, ya que los medios pueden manipularla a su gusto.
Dejemos una cosa clara: el virus existe y este no es un post negacionista. Ni anti-vacunas.
Creo que es importante recalcarlo y repetirlo las veces que haga falta. Mi más profundo y sentido pésame a todas las personas que hayáis perdido a alguien querido, y a aquellos que estéis aún luchando o sufriendo las consecuencias del mismo. Y con la ciencia en la mano, hay miles de artículos científicos en los que se habla del virus, de sus efectos, de los posibles tratamientos, de la inmunidad ante él… Así que, de nuevo, el bicho existe.
Y sí. El miedo es libre. El locus coeruleus se activa y nos hace reaccionar. Y tenemos una amígdala, que si está sensibilizada, nos hará reaccionar de una manera más profunda cada vez. Y en muchos casos, no de la mejor manera o de la más adecuada. Vuelvo al comentario de antes. Piensa, respira, y luego, sigue leyendo (si quieres).
Luego hablaré de las vacunas contra el SARS-CoV-2. Tampoco soy anti-vacunas. Han salvado (y siguen salvando) muchísimas vidas, y son una herramienta maravillosa de la sociedad moderna. Pero lamento decir, con la ciencia en la mano, que lo que se está inoculando no está científicamente probado que inmunice a largo plazo contra el virus, y sobre todo, no sabemos aún los efectos secundarios a medio y largo plazo. Porque no ha habido tiempo. Porque no se saben todos. Porque es un fármaco en experimentación. Porque las farmacéuticas están exentas de responsabilidad ante los efectos secundarios de las mismas (AQUÍ lo tienes bastante bien explicado, aunque es un poco largo de leer. En resumen, como no se puede demostrar muchas veces si es causa de la propia inyección o no, pues los fabricantes quedan exonerados). Tampoco entiendo cómo, con 12 casos de gripe registrados en España en toda la temporada 2020-21 este año tenemos campaña de vacunación doble: segunda o tercera dosis de COVID-19 unido a la de la gripe. ¿No entendemos cómo funciona el sistema inmune? ¿Que no se puede encargar de 200 cosas a la vez, y menos en personas de edad avanzada?

Entonces… ¿otro post más sobre la pandemia?
Pues sí. Y no. No quiero que sea un post más. Me gustaría que fuera informativo (de verdad), y que queden claros ciertos puntos. Y me gustaría abogar sobre todo por la paz, la información y la ciencia, a partes iguales (el 10 de noviembre fue el día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo).
Hace unos meses escribí un post sobre la situación que estamos viviendo, y explicaba los términos de la sindemia. Aún no he visto o leído en ningún medio de comunicación de gran difusión, ni a ninguna entidad estatal/gubernamental hablar de que el estilo de vida es importante para nuestra inmunidad. Porque estamos viviendo los efectos de la pandemia porque la gente se infecta y acaba en el hospital y algunos, desgraciadamente fallecen. Y eso satura la Sanidad, tanto pública como privada.. Si no, no sería un problema, ¿no?
Por tanto, yo me pregunto…
¿Qué dice la ciencia sobre cómo mejorar nuestra inmunidad frente al SARS-CoV2?
- Micronutrientes: La suplementación de vitamina A, D, zinc y selenio es susceptible de mejorar nuestra inmunidad y evitar o frenar la infección.
- Ejercicio: El ejercicio de moderada intensidad mejora la inmunidad y protege contra la entrada de virus, sobre todo actúa sobre inmunidad celular (anticuerpos) y mejora nuestra capacidad pulmonar.
- Sueño: Dormir 8 h o más mejora nuestra inmunidad. En un estudio con trabajadores sanitarios habla de que los turnos más largos afectan a la tasa de infección, entre otros.
- Patología crónica previa: Un reciente artículo del British Medical Journal muestra cómo la obesidad y la presencia de patología crónica son factores de riesgo importantes para la mortalidad hospitalaria en cualquier grupo de edad afectado por la COVID-19, siendo mayor si además están combinadas (obesidad y presencia de patología) y mayor cuanto mayor es la persona.
Y no hablemos del estrés crónico en la inmunidad, ni de los efectos del aislamiento social, que no me da para contar el resto de cosas.
Sí, sí, si más valdría prevenir, claro… pero ya estamos en pandemia, y cambiar hábitos es difícil, y curar patología crónica… ni te cuento. Los Gobiernos no están por la labor de implementar cambios en Sanidad, realizar programas de fomento del ejercicio físico, cambio de estilo de vida… y a la gente le gusta tomar sus pastillas, así que demos gracias que los científicos, con la ayuda de las farmacéuticas, han conseguido sacar una vacuna… o no.
¿Qué dice la ciencia sobre los pinchazos?
Repetimos que no es un post anti-vacunas. Ni negacionista. Vacunas buenas, virus existe. Puedes ver toda la información sobre los pinchazos de cada farmacéutica en cualquier medio de comunicación ´oficial´. Actualmente, en España, hay un 81% de personas (consultado el 5 de diciembre de 2021) que han recibido la pauta completa de vacunación. En Kenia (puedes consultar prácticamente todos los países del mundo en la web anterior), no llega al 6%. En Austria, no llega al 70%. En Kenia apenas hay casos nuevos, y puedes prácticamente viajar libremente desde cualquier país. Todos hemos visto las noticias en Austria y Alemania, pero no nos han presentado los datos científicos sobre las infecciones y cómo suceden las mismas. Luego los comentamos.
Vale, pero yo quiero vacunarme porque creo en ella.
He dudado muchísimo sobre la manera de escribir esta parte del post. De nuevo, ni es un post negacionista ni anti-vacunas. De hecho, creo que las vacunas ´al uso´ son métodos maravillosos de lucha contra ciertas enfermedades y de erradicarlas, como he dicho en uno de los primeros párrafos. Pero las de verdad. Y no un fármaco con el que están experimentando y que tiene efectos secundarios (neurológicos, inflamatorios y en el ciclo femenino, los más reportados hasta ahora), en muchos casos desconocidos (te dejo AQUÍ, AQUÍ, AQUÍ, AQUÍ y AQUÍ algunos de los estudios al respecto). El problema es que no se permite al ciudadano elegir. Y la vacunación, en España, no es ni siquiera obligatoria. Que no quiere decir que yo piense que no deba serlo, simplemente pongo los datos objetivos.
De nuevo, reitero que mi objetivo es la información. Todo escrito tiene un sesgo personal, pero como científica, y doctora (PhD), es importante hacer uso de la ciencia en esta sindemia para informar. Así que sigo con ello.
Existen dos factores importantes que no se tienen en cuenta ni se habla de ellos en los medios para que la gente pueda tomar una decisión:
- La protección de la vacuna deja de ser efectiva con el tiempo. En este estudio de la prestigiosa New England Journal of Medicine vemos como la vacuna protege en los primeros meses hasta en un 95% de desarrollar síntomas graves, pero esta protección cae hasta el 65% en muy poco tiempo (¡menos de 5 meses!). De hecho, si te fijas en la tabla, los casos sintomáticos de trabajadores vacunados aumentan exponencialmente con los meses, aumentando casi en un factor 30 (de 3 a 94). Te dejo los datos en esta tabla:

Aún no se sabe si las dosis de recuerdo serán efectivas. Ni los efectos a largo plazo sobre la inmunidad. Luego te pongo más cosas que dicen los estudios sobre cómo podemos luchar contra el virus (aunque lo dejo para otro post con más detalle). Así que la propuesta de tener que inyectarnos una dosis de recuerdo forever sin saber si sigue protegiendo o no de una infección más agresiva, no se sostiene, y menos, a modo de algo obligado. Hemos dicho que no protege de la infección, pero sí que es cierto que apunta a que si hay contagio, éste podría ser de menor virulencia y más leve… o no. Teniendo en cuenta nuestro sistema inmune, del que luego te hablo. Si nos fiamos de las noticias, encontramos de todo. Aquí, dice que el 85% de los ingresados con COVID están vacunados. Pero luego, sinceramente, otros periódicos afirman lo contrario. Por eso me voy a la ciencia. Porque las contradicciones en algo tan serio no tienen sentido.
- Nuestro sistema inmune, tiene una respuesta maravillosa de memoria, que dura muchísimo tiempo: En el caso de que hayamos pasado la COVID-19, la respuesta de memoria de nuestro sistema inmune se mantiene durante mucho tiempo. ¿Cuánto? La respuesta de células T (los anticuerpos, pero también otras células inmunes que no se miden en las analíticas ´convencionales´), se mantiene al menos 6 meses (publicado en la revista Nature, que no es cualquiera). y ya hay estudios que apuntan a que se mantiene incluso una memoria de más tiempo, con otras células como las , como las natural killer u otros linfocitos T. Los últimos estudios (llevamos 2 años justitos de pandemia mundial, no da tiempo a más) apuntan a que esa respuesta de diferentes tipos de células puede durar años y protegería a los ya contagiados de nuevos contagios.

¿Y los asintomáticos?
Pues es otra de las cosas que no se tienen en cuenta. Los asintomáticos tienen una respuesta maravillosa y de memoria, y un sistema inmune estupendo, que no ha dejado que les infecte el virus. Lo que pasa es que la respuesta, a veces (no siempre), es más humoral, y no se detecta en las analíticas de anticuerpos (¡porque no se ha infectado!).
Así que, ¿por qué vacunar (pinchar un fármaco, no una vacuna al uso) a este colectivo, cuando su respuesta inmune es mejor que la de una persona a la que se va a vacunar y que no ha pasado el virus?
¿Y a los niños?
La comunidad científica no parece avalarlo, incluso una carta al British Medical Journal afirma que se hace muy difícil de justificar. Por otro lado, se reportan efectos secundarios severos, como por ejemplo, miocarditis en adolescentes (de 12 a 17), que no parecen compensar a los beneficios.
Además, los efectos adversos de la vacuna en niños no parecen compensar a los beneficios, como muestra este gráfico de este artículo en el que se habla de las muertes de niños por la COVID-19 y por la vacuna. Si la vacuna no protege del contagio, ¿cuál es el objetivo de inyectar dicho fármaco a un grupo de personas que no sufre por el virus? Porque repetimos, el virus existe, pero no afecta sintomáticamente a este grupo de población y sí de manera grave a pacientes con patología crónica previa. El virus se une a la enzima conversora de angiotensina (ACE-2), que se expresa en diferentes órganos, y por eso la COVID-19 y sus efectos secundarios afectan a pulmón, mama, músculo esquelético, hígado y tiroides, entre otros.


Las reuniones… ¿sólo de vacunados?
Para ir acabando, querría hacer una exposición sobre la estigmatización de los no vacunados en la sociedad. En la revista The Lancet hay un artículo precioso al respecto, en el que se habla incluso de la parte social, del nazismo, y de la segregación en EE.UU, haciendo referencia a momentos históricos en los que se ha discriminado a personas por el color de su piel o sus ideas y llamando a la paz y a la unidad social. Oiga, en un artículo científico de esta revista tan prestigiosa. Que no se nos olvide que en épocas de crisis es cuando triunfan las ideas más radicales, y como estamos centrados en una respuesta de lucha-huída en el presente más cercano, no vemos ´más allá´. No es el momento de quedarse con lo primero que nos cuentan, sino que tenemos que tener criterio para poder avanzar y buscar soluciones efectivas para el futuro. Si ya lo dice el refrán: ´Pan para hoy, hambre para mañana´.
En el artículo habla de los focos de infecciones, que son en reuniones… de vacunados. En Alemania, más del 55% de los infectados mayores de 60 años tienen la pauta completa de vacunación porque… la vacunación no protege de la infección. En este otro artículo habla de focos de infección en EE.UU, en sitios públicos. Mira esta gráfica tan bonita y dejemos de hablar de la pandemia de los ´no vacunados´, por favor.

Y por último en este punto, te dejo un artículo AQUÍ de The Lancet, en el que habla de que ´es una negligencia hablar de la pandemia de los no vacunados, y sobre todo a la hora de tomar medidas relativas a la salud pública, cuando son una fuente de transmisión igual que los vacunados’. ¿Cuál es entonces el sentido de los pasaportes Covid tal y como están diseñados actualmente? Aquí puedes ver, en la gráfica sacada del mismo artículo, el porcentaje de vacunados sintomáticos, en este caso en Alemania, donde se impone la obligatoriedad de la vacunación. En la misma puedes ver que la tasa de vacunación en ese grupo de edad supera el 80%, y sin embargo, su tasa de contagio es mayor del 60%. El grupo de población representado es el de mayor de 60 años, el más afectado por los contagios y sus consecuencias.

Entonces, ¿qué pasa con la vacunación?
Por último, pero no por ello menos importante, como dicen los angloparlantes, la conclusión. De nuevo, el virus existe. Las vacunas han erradicado enfermedades y salvado vidas. Lo que se vende como vacuna contra la COVID está demostrando que, lamentablemente, no lo es. Con el tema de la vacunación para el SARS- CoV-2, los estudios no la señalan ni la confirman como una medida única, y, desde mi opinión basada en evidencia, no debería ser ni una medida obligatoria (y menos aún estatal o gubernamental) ni motivo de exclusión social (por favor, este titular es horrible), hasta el punto de que se ha llegado a publicar en los medios la idea o sugerencia de no invitar a los no vacunados a tu casa.
Y yo hago una reflexión: esto es lo mismo (e incluso peor, ya que la vacunación tampoco te libra de contagio) que si nos pusiéramos a discriminar a los que fuman, no se cuidan con la comida, no hacen deporte, no duermen, o sufren una patología psiquiátrica, o crónica, porque hacen más gasto a la Sanidad, o porque son los que tienen más posibilidad de tener complicaciones post-vacuna y/o post-infección. Cada persona es individual, única y tiene sus peculiaridades, historia, ideas, carácter, personalidad.
¡Ah! Y esto sí que es importante: hablemos de nuestro derecho a la privacidad. El otro día hasta en la peluquería tuve que firmar un documento de la Ley General de Protección de Datos. ¿Por qué esto es diferente? ¿Por qué ha de ser pública esa parte de nuestro historial médico? ¿Acaso lleva la gente escrita para que lo veamos todos, si toma medicación para la esquizofrenia, le han diagnosticado problemas de sociopatía, o ludopatía, o toma Viagra para problemas de erecciones? Pues eso.
¿Y hay alguna opción más de tratamiento?
Pues ya haré otro post, que este se me queda muy largo ya, pero está demostrado que mantener los niveles de vitamina D por encima de 50 ng/mL reduce la mortalidad a cero prácticamente. Además de la archiconocida melatonina, que ya hice un post al respecto, con la COVID-19, y sobre muchas más cosas.
En fin, que no te aburro más, espero que te haya gustado, sabes que tienes muchas más entradas en el blog, recetas y un montón más de información, además de nuestros cursos!